Mediante una inédita intervención se logró incorporar la prótesis robótica a la masa muscular, esquelética y nerviosa de un hombre que tenía una amputación por encima del codo
Una compleja operación quirúrgica permitió incorporar la primera mano biónica completamente integrada en el cuerpo de un hombre.
Mediante la inclusión de sensores se logró implantar en un paciente, que tenía una amputación por encima del codo, la prótesis robótica a la masa muscular, esquelética y nerviosa.
"En el campo de las prótesis robóticas, las expectativas son muy altas, pero los avances de los últimos años son realmente excepcionales", comentó el italiano Enzo Mastinu, investigador del Sant'Anna BioRobotics Institute, que participó en el estudio liderado por Max Ortiz Catalan de la CBPR.
Las prótesis son la forma más común de reemplazar una extremidad perdida, pero a menudo son difíciles de controlar y ofrecen un movimiento muy limitado.

Los investigadores reconfiguraron la extremidad humana para que la prótesis pudiera integrarse tanto eléctrica como mecánicamente. Los autores del estudio diseccionaron los nervios periféricos que quedaban en la extremidad, redistribuyéndolos en nuevos músculos.
"Se tomó tejido muscular de las extremidades inferiores, creando así nuevos sitios de músculos artificiales en el brazo", explicó Mastinu. "Estos sitios han cobrado nueva vida al hacer la conexión con los nervios: así hemos obtenido nuevas señales de control para las prótesis que transportan información, traducida en movimiento por algoritmos basados en Inteligencia Artificial", detalló el investigador de la Escuela Sant'Anna.
Además, "la mano biónica se ha unido al hueso residual mediante un implante de titanio, lo que permite una conexión más cómoda y eficaz", señaló Mastinu.