En paralelo, Uruguay insistirá en su reclamo histórico de “flexibilizar” las normas internas del Mercosur para permitir acuerdos comerciales individuales con terceros países, una postura que genera tensiones con Brasil.
02/07/2025
El presidente argentino recibe este miércoles y jueves a sus pares de Brasil, Uruguay, Paraguay y Bolivia
Javier Milei encabeza su primera Cumbre del Mercosur como presidente pro témpore del bloque, que inicia este miércoles con la reunión de cancilleres y ministros de Economía y que culmina el jueves en el Palacio San Martín, de la Cancillería argentina en el barrio de Retiro, con la sesión de presidentes y jefes de Estado.
Milei cerrará la cumbre el jueves y entregará la presidencia pro tempore del bloque a su par de Brasil, Lula da Silva, en medio de un clima de fuertes tensiones políticas con el mayor socio comercial regional.
Según reconocen en el gobierno, esta cumbre del Mercosur se convierte en un escenario clave para el proyecto político y diplomático del libertario, no solo por el contenido de la agenda económica -la modernización del bloque, la relación con la Unión Europea y un eventual acercamiento a Estados Unidos- sino por las tensiones políticas con el socio mayor de Argentina, Brasil.
Según fuentes oficiales, el presidente argentino reiterará su intención de impulsar una agenda más aperturista, con prioridad en dos ejes: destrabar el acuerdo de libre comercio con la Unión Europea, trabado desde 2019 por diferencias regulatorias y ambientales, y retomar conversaciones con Estados Unidos sobre un eventual tratado bilateral que incremente el flujo de inversiones.
En paralelo, Uruguay insistirá en su reclamo histórico de “flexibilizar” las normas internas del Mercosur para permitir acuerdos comerciales individuales con terceros países, una postura que genera tensiones con Brasil.
Una cumbre con la mirada puesta en la tensión entre Milei y Lula da Silva
La presencia de Lula da Silva genera expectativa política por la relación personal distante que mantiene con Milei. Si bien hubo gestos recientes para suavizar la tensión, hasta el momento no se confirmó un encuentro bilateral formal entre ambos presidentes.
En tanto, desde el Gobierno argentino señalaron que esperan “una reunión tranquila”, sin sobresaltos ni desencuentros, como sucedió en la anterior cumbre de Montevideo, en la que Milei llamó a “cambiar la política arancelaria del Mercosur o disolverlo”.
Entre los temas prioritarios de la agenda figuran:
El futuro del acuerdo Mercosur-Unión Europea y su eventual ratificación antes de fin de año.
La agenda energética común y proyectos de interconexión regional.
La situación de Venezuela, cuya presidencia pro tempore del Mercosur ha sido objetada por algunos socios.
La definición de nuevas reglas de origen para productos exportables.
En línea con su acuerdo con Donald Trump, Milei planteará la ampliación de la lista de excepciones a los aranceles, vitales para que Argentina pueda lograr su ansiado acuerdo comercial global con Estados Unidos, su principal aliado geopolítico.