30/09/2024
El encuentro oficial entre ambos mandatarios ocurrió minutos después de las 15 y duró más de dos horas. El presidente salvadoreño, que llegó al país el pasado jueves, se irá mañana por la noche luego de ver por la tarde a la vicepresidenta, Victoria Villarruel, en el Senado
El presidente Javier Milei recibió esta tarde a su par de El Salvador, Nayib Bukele, quien desde el jueves está en la Argentina en visita oficial. En junio de este año se habían visto cuando el líder libertario asistió a la ceremonia de asunción del político centroamericano al ser reelecto. Por la noche habrá una recepción en la Quinta de Olivos.
El mandatario extranjero fue recibido con alfombra roja por Milei, mientras lo escoltaba por la banda militar del Regimiento de Granaderos quienes le hicieron un pasillo de honor y luego le presentó a los ministros.
El encuentro se demoró más de lo previsto ya que Bukele arribó a la Rosada a las 15.22 rodeado de un gran operativo de seguridad. Un pequeño grupo de sus compatriotas, unas 15 personas, lo esperaban en la zona de la explanada con una bandera de su país.
Milei y Bukele se dirigieron luego al Salón Blanco donde posaron para los fotógrafos oficiales para un saludo protocolar y se dirigieron al despacho presidencial para mantener una reunión a solas. En tanto, los ministros del Gabinete nacional con varios de sus pares salvadoreños departían en el Salón Sur, ubicado en una zona contigua al Blanco. Luego hubo una reunión ampliada con los dos mandatarios y sus equipos de trabajo en el Salón Eva Perón. El jefe de Estado salvadoreño se retiró a las 17.20 de la Rosada, con una fuerte escolta policial.
“Tengo la mejor impresión del mundo sobre Milei, me encanta lo que hace, somos amigos y vamos a lograr buenas cosas para ambos países”, le dijo Bukele, en sus primeras palabras oficiales en tierra argentina a un grupo de periodistas luego del acto que protagonizó con la canciller Diana Mondino, tras depositar una ofrenda floral en el Monumento a San Martín en el barrio de Retiro a unos pocos metros de la sede de la Cancillería argentina. Fue apenas un rato antes de su desembarco en la Casa de Gobierno.