17/08/2022
Se trata un marsupial que tenía el tamaño de un coyote y un pelaje rayado. El último ejemplar murió hace 86 años, en un zoológico
Un ambicioso proyecto científico busca "revivir" al tigre de Tasmania, un mamífero marsupial extinto desde 1936. Para lograrlo, los expertos combinan estudios genéticos, procesos de recuperación de ADN antiguo y técnicas de reproducción artificial.
El tilacino, como se llamaba oficialmente, era un animal del tamaño de un coyote. Era carnívoro y tenía un papel elemental en su ecosistema. El último ejemplar, llamado Benjamín, murió en cautiverio en un zoológico hace 86 años, en 1936.
Cómo era el tigre de Tasmania
El Tilacino era originario de Tasmania y del continente australiano. Fue el único miembro de la familia Thylacinidae que sobrevivió hasta los tiempos modernos, según el Museo Australiano. El animal —que pareciera ser una mezcla entre un lobo o coyote y el tigre, por sus rayas— tenía un pelaje marrón amarillento con rayas, mandíbulas fuertes.
Además, tenía una bolsa para llevar a sus crías -de ahí que fuera clasificado como marsupial, que son las especies mamíferas que nacen antes de haber completado su desarrollo y terminan su proceso en el marsupio materno-. En el 1800, los colonos europeos se dedicaron a cazar a todos los tigres de Tasmania, a quienes culpaban por la pérdida del ganado.
No obstante, los historiadores aseguran que en la mayoría de los casos, los verdaderos depredadores de ovejas y otros animales eran los perros salvajes. En consecuencia, el Tilacino casi desaparece por completo desde hace unos 200 años, de no ser por una pequeña comunidad que sobrevivió en la isla australiana.
El último ejemplar de esta especie vivió hasta 1936: Benjamín murió en cautiverio a causa de la exposición en el Zoológico de Beaumaris, en Hobart. Poco tiempo después de esta pérdida, se otorgó el estatus de protección a los tilacinos.
Más voces opinaron sobre el proyecto
Mientras los científicos australianos informan con entusiasmo sobre la iniciativa que tiene como objetivo revivir a una especie marsupial extinta desde hace casi 100 años, otros profesionales ofrecieron sus argumentos en contra del proyecto. Para Tom Gillbert, un profesor del Instituto GLOBE de la Universidad de Copenhague, el equipo no podrá recrear exactamente el tilacino, sino que terminará creando un animal híbrido, una forma alterada de tilacino.
"Es poco probable que obtengamos la secuencia completa del genoma de la especie extinta, por lo que nunca podremos recrear completamente el genoma de la forma perdida. Siempre habrá algunas partes que no se pueden cambiar", disparó. Asimismo, el especialista apuntó que los científicos "tendrán que elegir qué cambios hacer" y señaló que, "por lo tanto, el resultado será un híbrido". En este orden, determinó que un tilacino híbrido genéticamente imperfecto pueda tener problemas de salud y que no sobreviva sin mucha ayuda de los humanos.
Por otro lado, otros expertos criticaron el hecho de que se inviertan decenas de millones de dólares en intentos de revertir la extinción cuando el mundo posee cientos de animales vivos en peligro de extinción. "¿Se dan cuenta las partes interesadas de que lo que obtendrán no será el tilacino sino algún híbrido imperfecto? Lo que no hace falta es que haya más gente decepcionada o que se sienta engañada por la ciencia", concluyó Gillbert.