24/11/2021
La especie, perteneciente a la familia de las boas, habitó en el Caribe colombiano hace 60 millones de años
Paleontólogos del Instituto Smithsoniano de Investigaciones Tropicales de EEUU halló hace 19 años en Colombia los restos fósiles de una serpiente que luego, con el transcurso de las investigaciones, fue catalogada como la más grande de esa especie de las que se tenga registro. El ejemplar data de hace unos 60 millones de años y midió unos 15 metros de largo, con un paso aproximado de 1.200 kilos.
Fue bautizada como Titanoboa cerrejonensis por su tamaño enorme y el lugar donde fueron hallados sus restos, que es la mina de carbón del Cerrejón, en Colombia, una de las minas a cielo abierto más grande del mundo.
En un artículo de National Geographic en Español divulgado recientemente se explicó que esos ejemplares vivieron hace 60 millones de años en los ríos y pantanos de Colombia. Producto de su envergadura, esta era capaz de devorar cocodrilos de un solo bocado, sin hacer bulto, y su apariencia física se asemejaba a lo que hoy sería una boa constrictor.
Según los especialistas, una comida habitual para la Titanoboa eran los cocodrilos, aunque estimaban que por su tamaño lo hacía sin provocarse una inflamación.